Inmediación y digitalización en los procedimientos civiles: ¿se ha esperado suficiente?
Idealex
Ariel Wolfenson.
Nos estamos acercando cada vez más rápido a la mitad de esta década. Como abogados sabemos muy bien que, el tiempo judicial funciona muy diferente —e imperfectamente— para nosotros en comparación a las urgentes necesidades jurídicas de las personas que asesoramos.
Es en ese contexto que, es válido observar que ha ocurrido con la tan esperada reforma a los procedimientos civiles, las cuales prometían traer inmediación, mayor agilidad, y eficiencia en la justicia civil.
Asimismo, cabe preguntarnos qué ha ocurrido con la reforma a los juzgados de policía local, los cuales nos siguen exigiendo presencialidad en la interposición de demandas, querellas y escritos, e incluso la gran mayoría de ellos, también presencialidad en todo tipo de audiencias.
Cabe mencionar que, si observamos los procedimientos de familia, laboral y penal, estos sí cumplen en general los estándares procedimentales aceptables para un mundo digitalizado, tecnológico y cada vez más instantáneo como el que vivimos.
Toda vez que, en su mayoría se aceptan las comparecencias a audiencias telemáticas hasta hoy en día, son procesos concentrados de uno o dos comparendos la mayoría de ellos (audiencia preparatoria y juicio), en contraposición a lo que ocurre en su primo civil y para qué decir en los juzgados de policía local.
Es importante señalar que, hasta la fecha los criterios de semipresencialidad o telematicidad de las audiencias todavía es variable, dependiendo del Tribunal y los criterios de cada juez.
Es en este sentido considerado como de gran avance el “Proyecto de ley promueve la comparecencia remota en juicio y las notificaciones por medios electrónicos” en actual tramitación en el congreso, el cual busca fomentar la digitalización iniciada durante la pandemia del coronavirus y traer para quedarse la nueva forma electrónica y a distancia del funcionamiento de la justicia. Sobre este tema he escrito anteriormente destacando el abanico de grandes oportunidades que se abren para la profesión de abogado gracias a este mecanismo, la cobertura nacional que nos otorga e inclusive internacional, posibilitándonos manejar más asuntos de clientes y ampliar nuestra carrera de patrocinados, todo a un menor costo administrativo, temporal y logístico.
Es en este sentido que, destaco dos grandes pendientes en cuanto a reformas legales en los procedimientos civiles en Chile se refiere:
i) El primero es la necesidad urgente e impostergable de digitalizar los juzgados de policía local y su arcaico funcionamiento a papel.
ii) Avanzar en un criterio o reforma universal que permita la concurrencia telemática de los litigantes a todo tipo de audiencias y procesos por defecto y/o por el solo hecho de así solicitarlo, generando una estandarización y facilidad en el modo de ingreso evitando la dispersión de enlaces, y modos de solicitarlo y
iii) Concluir con la reforma de procedimiento civil a efectos de tener procedimientos eminentemente orales y concentrados, donde se puedan otorgar respuestas efectivas, dinámicas y rápidas a procesos al mismo tiempo que se mantenga la calidad sobre los mismos, permitiendo juicios en la mitad si no en un cuarto del tiempo que actualmente implican, alivianando la carga tanto de los litigantes, funcionarios de tribunales, y en post de los derechos de los clientes. Cuestión de urgente importancia considerando la saturación y sobrecarga que existe en el ámbito de judicatura especialmente en el procedimiento civil actual.
En fin, la espera ha sido larga, esperemos valga la pena.
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